"EL HERMANO MAYOR"
EL MAESTRO, EL AMIGO, EL SENDERO…!No. 77



PROLOGO

Los enigmáticos profetas, en realidad estos seres que la Iglesia y la humanidad en la era pasada les llamaban "profetas", más que eso, eran grandes conocedores de las ciencias ancestrales que durante la última era de oscurantismo, de dogmas, persecuciones, explotación a la mujer, materialismo, etc.., fueron preservadas con mucho celo (sciencia occulttata - ciencias ocultas) por el peligro que representaban darlas al vulgo debido al fanatismo existente de la época y que se fué acrecentando durante la Era de Piscis con diversos cultos religiosos y sectarios; así vemos las luchas fraticidas en nombre del Cristo ya conocidas por todos, inquisiciones, etc. Estos seres más que profetas, fueron profundos conocedores de las ciencias cosmogónicas que en su conjunto enseñaban la psicología del universo y como estaba planteado el plan que nos mueve a todos en el famoso "Libro de los Cielos" que no es otra cosa que el estudio matemático de las ciencias estelares y las influencias que ejercen sus radiaciones a la vida general en las Tierras que pueblan el Cosmos. Así con un estudio profundo de aquello, tanto Malaquías, como la Escuela de Nostradamus, etc.., fueron grandes investigadores y estudiosos de estas ciencias estableciendo en sus cálculos las tendencias de los tiempos que estamos viviendo. Pero nada de esto es exacto, el Ser Humano es arquitecto de su propio destino y por sobre todas las cosas está la voluntad divina y a ella si estamos todos sometidos. La Fe con sabiduría lleva a la realización, la Fe con dogma sin sabiduría nos lleva a la ceguera y al fanatismo.

Con el mayor respeto hacia EL y todos los Seres de Luz, que apoyan el legado de los MAESTRES, fraternalmente, PAX.!

Ga. Carlos Santos Puig

Guayaquil, Ecuador - 16 de Mayo del 2.005


Los fenómenos psíquicos, la mente y la clarividencia


Esta vez trataremos de explicar los fenómenos psíquicos en forma sencilla y que se ajuste tanto al sentido común, como a la lógica, sin tratar de entrar en problemas de tipo psicofisiológico, pero no podemos salir adelante sin siquiera mencionar que el hombre es, en su estructura, algo así como una planta radioemisora, que tiene como aparato principal y potencial el cerebro. Aunque la mente se encuentra en cada una de las células de nuestro cuerpo, sin embargo, el asiento de ella, como ustedes saben, se halla en el conjunto de células que integran el cerebro, que como sabemos son de tipo nervioso. Sabemos que todo órgano nervioso es conductor de energía y que la energía tiene su asiento en la mente; también sabemos todos que en el cuerpo humano solo existen dos tipos de células que no se reproducen, estas son las células cerebrales y las del sistema nervioso. Durante nuestra vida conservamos las mismas que teníamos al nacer; solo aumentan de tamaño, pero no se multiplican y crecen hasta los veinte 6 veintiún años.

Ahora bien, hemos dicho que la energía tiene su asiento en la mente, y es lógico, la mente se transmuta en energía y la energía en mente, así como la energía se transmuta en materia y no la materia en energía. Ya con todo lo dicho se puede apreciar que, entonces, la mente del hombre, teniendo como vehiculo de expresión el cerebro, es en si un punto vibrante en la mente cósmica, algo así como una individualización de la mente suprema, o algo así como una sintonía universal, teniendo a su vez como base o trasfondo el espíritu divino. Ahora podemos comprender como en su manifestación física. , el hombre aparece como creador y a la vez receptor de lo creado; es un transmisor de lo interno a lo externo, y viceversa. El hombre, como vibración de la mente cósmica, esta en constante desarrollo de su sabiduría; constantemente se esta conociendo a si mismo, y conocerse a si mismo es conocer a la mente cósmica, de la cual, como hemos dicho, es un simple punto vibrante, aunque todas las cualidades de ella están en potencia en el.

De esta forma, el hombre puede mover su cuerpo físico hacia donde quiera, pero el centro de su ser esta inmóvil en el Todo universal, y sin embargo, lo capta todo, porque en silo encierra todo, obedeciendo aquello de que: `las leyes que rigen y han creado las parte, son las mismas que representan al Todo". Y ahora comenzaremos por el fenómeno de la clarividencia. El hombre, por medio de este fenómeno, puede ver los acontecimientos materiales antes de ocurrir y también los que han ocurrido con gran anterioridad, sin el haberlos presenciado. Esto nos demuestra tres cosas; primero: que nada se crea, ya todo existe en el mundo mental; segundo: que en dicho mundo nada se pierde, toda ha sido, es y será, y tercero: que por medio de todo esto, en el mundo mental o espiritual no existe ni tiempo ni espacio, sino el eterno siempre. Esto naturalmente es un misterio para el hombre poco entrenado en estas modalidades de pensamiento y que solo se ocupa de la parte externa de las cosas. Pero el hombre evolucionado ya pisa los primeros peldaños de esa escala superior del pensamiento, la que le Ilevará a presenciar un mundo nuevo, ese mundo de maravillas, tanto en belleza coma en sabiduría. La cuarta dimensión, siendo un mundo distinto, ocupa el mismo lugar del que Ilamamos mundo físico, pero el hombre corriente no lo puede ver; no es un mundo de visiones, no, al contrario, es un mundo de realidades, Ejemplo: así como cuando un jinete se encuentra frente al mar disfrutando de una puesta del Sol, el caballo que esta con el no lo ve, porque no entiende lo que es una puesta de Sol; así también esta el hombre inferior, el hombre que no esta evolucionando, con respecto al que lo esta; aunque vean los dos los mismos fenómenos de la naturaleza, sin embargo, Ios dos no lo aprecian en la misma forma.

La clarividencia


Reanudamos nuestro tema sobre los fenómenos psíquicos. Habíamos afirmado en relación a la clarividencia que, aunque el sentido de la palabra solo significa la facultad de ver las cosas claras, a este vocablo se le ha dado otro sentido, tal es el de la facultad psíquica de ver el pasado, e] futuro, en fin, ver en forma de visión o en forma intuitiva, a manera de presentimiento, hechos ya ocurridos o por ocurrir. Aunque la técnica, desde el punto de vista esotérico, o mejor dicho, psíquico, es sencilla respecto a estos fen6menos, su explicación resulta algo complicada. Por ejemplo: se puede ver el futuro o el pasado por medio de un sueño, o por medio de lo que llamamos visión. La diferencia que existe entre el primero y el segundo es que Este (en el sueno) se produce con el consciente inactive, en cambio en el segundo (en la visión) el consciente est5 activo, esto es, que nuestra conciencia de existir en el primer caso esta dominada por la acción del sueno y en el segundo esta en sus plenas facultades. Pero es cosa muy cierta que aún en los casos en que el sujeto que tiene la visión esta despierto, la visión nunca se produce en el mundo objetivo, sino siempre en el subjetivo. Por esto podemos encentrarnos en una sala de baile a la que hemos acudido para distraernos con las delicias de la danza, y cuando estamos preparados para entrar al llamado del primer set musical, súbitamente puede presentarse la visión sin nosotros esperarla; la sala se nos convierte de pronto en la amplia nave de un hermoso templo, donde se ve la realización de un sublime ceremonial; todo esto lo podemos ver, siguiendo los compases del ritmo que estamos bailando, sin que nuestra pareja se de cuenta de que estamos asistiendo a dos actos simultáneamente: en el mundo objetivo, que es el del baile que estamos disfrutando, y otro en el subjetivo, que es donde se encuentra el sacerdote, etc. Es un hecho curioso que mientras estamos presenciando una visión, nos parece que estamos asistiendo a aquel acto; sin embargo, solo ocurre aqueIlo en nuestra mente.

Aquellos quienes tienen esta facultad podrán observar que, mientras están en una visión de estas, el panorama se mueve en dirección hacia donde ellos se mueven; esto nos demuestra que ocurre en nuestro cerebro y no fuera de el.

El S.H.M. en Isis-Ra-Hel, en su visita a Jhesu-Salem en 1.982

Fenómenos psíquicos

En los sueños verdaderos nos parece a menudo que visitamos lugares que en vigilia conocemos, pero recordemos que, cuando soñamos, creemos estar en un lugar que conocemos, pero en realidad al despertar reconocemos que no era exactamente igual a dicho lugar en que nos encontrábamos en el sueno. Ejemplo: sonamos que estamos en el Zócalo de México, pero a la vez en nuestro sueno aparece un gran parque yen medio existe una ermita, cosa que es incierta, como ustedes saben.

No hay que confundir el papel que representan las células impresionadas del cerebro con el fenómeno del sueno. De los millones de células de que consta nuestro cerebro, un corto numero de ellas se encuentran impresionadas por nuestros actos, nuestros pensamientos, lo que vemos, olmos, sentimos, etc., desde que nacemos. Estas son las que constituyen el registro de nuestra vida; son las que representan nuestra memoria. Si el sueno tuviese que ver directamente con las células impresionadas de nuestro cerebro, al acostarnos, no haríamos mas que vivir trozos de nuestra vida pasada con perfecta claridad, ya que el sueno vendría a ser un recuerdo vivido de nuestro pasado, cosa que no es así. Al contrario, los sueños son en su mayoría creaciones de nuestra mente, acontecimientos que no hemos vivido en otras ocasiones; pueden tener relación con nuestro pasado, pero de ninguna manera son el recuerdo fiel de un hecho. Soñamos parajes, edificios, etc., parecidos a los que conocemos, pero no son el recuerdo de ellos.

Ejemplo: soñamos sin conocer España que hemos estado en Madrid y que estamos frente a un gran edificio que en vigilia no lo hemos visto en ninguna parte, ¿por que ocurre esto, si no tenemos en nuestro cerebro células impresionadas con dicho edificio? Se dice que nuestros sueños son creaciones de nuestra mente. Esto es más aceptable desde un punto de vista puramente racional, ya que cuando ahondamos en el estudio reconocemos que en el mundo mental no falta nada por crear: todo ha existido, existe y existirá; lo que se hace es descubrir to que ya existe. Edison, por ejemplo, no creo nada, solo descubrió las leyes-que hacen posible la existencia en el mundo de la Iámpara incandescente; un pintor solo va colocando un color después de otro, que da la presencia o representación de tal o cual paisaje, etc. Nada se crea, nada se destruye, todo, todo se transforma, tal es la ley.

Con este razonamiento podemos entrar en lo más lógico respecto a los sueños. El hombre, como entidad cósmica, se encuentra como crucificado en dos polaridades: la polaridad material, constituida por el mundo fenomenal, y la polaridad espiritual o mundo de las causas. Podemos usar la frase vulgar de que el hombre es un "Ileva y trae", entre el mundo de los efectos y el de las causas. Trae al mundo físico la visión, tanto del pasado de sus vidas, así como de las leyes de las cosas que todavía no han aparecido en nuestro mundo. Es el case de los inventores, el case de los que ven sus vidas pasadas.

El hombre, al morir, se lleva en si el recuerdo de toda su vida y por esto toda persona, al morir, cree que no ha muerto, sigue viviendo su vida ininterrumpidamente; ya de esto hemos hablado en charlas pasadas.

Por esta misma razón, el hombre ve el futuro en muchas ocasiones, pero falta algo que aclarar sobre estos estudios, y es el por que no todos ven el futuro, ni ven sus vidas pasadas.

¿Por que no todos los hombres ven sus vidas pasadas, ni ven el futuro?

Mi tema de hoy es este:
Comenzaré por decirles que el día que la humanidad se libere de vicios y toxinas, y practique la fraternidad, se quintuplicara el número de los que verán sus vidas pasadas y también sus futuras encarnaciones. Porque solo depurando el cuerpo de toxinas, podremos ser verdaderos receptáculos de las altas vibraciones de la mente cósmica, ya que, como he dicho en otras ocasiones, el hombre es un punto vibrante en la misma.

Por tal motivo, cuanto mas limpio y depurado tenga su receptáculo, más recibirá la sabiduría sempiterna de la mente suprema.
Los científicos estiman que en el cerebro existen dos tipos de células: las de voluntad consciente y las de voluntad inconsciente. Las conscientes son las que retienen los hechos y los pensamientos a to largo de nuestra existencia terrenal. Las inconscientes, o subconscientes, son las que sirven de vehiculo inconsciente al supraconciente. El supraconciente, que es el que to sabe todo, no solamente envuelve nuestro cuerpo físico, sino que invade todo el Universo infinito. Es algo así como el sustrato de nuestra mente. Es el que tiene contacto con las vibraciones del Espíritu en donde esta la fuente de la sabiduría universal.

Cuando la parte física (el cuerpo) del hombre esta intoxicada, la mente del sujeto se materializa; sus pensamientos y deseos son de tipo sensual; sus costumbres se hacen vulgares. Entonces podremos decir que su materia es burda. De esta forma sus células inconscientes -que, coma hemos dicho, son las que sirven de vehiculo al supraconciente, no están cargadas de ese magnetismo espiritual necesario para que la sabiduría divina pase a las células conscientes del cerebra y de esta forma el hombre sepa de sus vidas pasadas y pueda saber de sus vidas futuras.

Es esta la razón por lo que en todos los Centros Iniciáticos verdaderos; inclusive en la Suprema Orden del Aquarius, de la Augusta Gran Fraternidad Universal, los candidatos a la luz de los altos misterios son sometidos a rigurosa disciplina, tanto física como mental.

Recordemos que Jesús, el símbolo del hombre verdaderamente evolucionado, no solamente sabía to que había sido en sus encarnaciones pasadas, sino que conocía su futuro y el de su pueblo. Así como conocía las encarnaciones pasadas de los demás y los pensamientos de los que le rodeaban. Por eso dijo refiriéndose a Juan: "...Elías estuvo entre ustedes y no le conocieron", y refiriéndose en otra ocasión a un hombre, le preguntaron: "¿Fue este el que pecó o fue su padre?", y el contestó: "ni este pecó, ni su padre".